Ya sabéis que me encanta viajar así que cuando Zandra y Edgar me propusieron hacer las fotos de preboda por la Costa Brava les dije que sí sin pensármelo.
Y la experiencia no pudo ser mejor.
Visitamos dos de los pueblos con más encanto de Girona que son Peratallada y Pals.
Pasear por el centro histórico es como retroceder varios siglos atrás.
Calles empedradas, arcos medievales, puertas antiguas de madera y un sinfín de rincones mágicos perfectos para disfrutar haciendo sus fotos de preboda.
Ya por la tarde aprovechando la puesta del sol nos dirigimos a Calella de Palafrugell, un pueblo costero con unos paisajes increíbles.

El estilo para esta preboda fue como a mí me gusta, dejando libertad a la pareja para que disfrutaran a tope de cada lugar y yo capturando esos momentos de una forma muy natural y dinámica.
Esta es la mejor manera para que el reportaje de fotos de preboda sea una experiencia única que recordaréis toda la vida.
Fotos auténticas en las que os reconocéis ya que no tenéis que posar y de esta forma logro capturar vuestra esencia y personalidad.

En esta ocasión me acompañó mi gran amiga y fotógrafa Rocío Deblás, que me ayudó con sus fotografías llenas elegancia y naturalidad.
También tuvimos la suerte de contar con un guía de lujo ya que nuestro compañero Fran Decatta se nos unió ya que vive muy cerca de allí.
Muchas gracias Zandra & Edgar por vuestra simpatía, confianza y por ser tan bellas personas.

Os dejo aquí también un enlace a su Postboda en Venecia, que os va a encantar, así que no os la perdáis.